Juan 16:8-11
8 y cuando él venga, convencerá al mundo de pecado y de la justicia de Dios y del juicio que viene. 9 El pecado del mundo consiste en que el mundo se niega a creer en mí. 10 La justicia está disponible, porque voy al Padre, y ustedes no me verán más. 11 El juicio vendrá, porque quien gobierna este mundo ya ha sido juzgado.

 

Jesús vino para hacernos ver nuestro pecado y la necesidad de reconciliar con Dios. La justicia de Dios es: el pecado lleva a la muerte. Nuestros pecados merecen el castigo de Dios que viene de Su justicia. Dios nos había advertido desde el principio, en los tiempos de Adán y Eva. Sin embargo, “Al que no cometió pecado alguno, por nosotros Dios lo trató como pecador, para que en él recibiéramos la justicia de Dios” (2 Corintios 5:21). Demos gracias por esta justicia de Dios que hemos recibido a través de la sangre de Jesús. Ya que esta justicia ha sido pagada por el gobernante de este mundo, Jesús, el juicio vendrá algún día para juzgar a todos. En aquel día, los que hemos aceptado a Jesús también vamos a ser juzgados, pero si verdaderamente hemos aceptado a Jesús ya tenemos la salvación garantizada, pero que hay de los que todavía no han escuchado de esta buena nueva?