Filipenses 2:3-4

3 No hagan nada por egoísmo o vanidad; más bien, con humildad consideren a los demás como superiores a ustedes mismos. 4 Cada uno debe velar no sólo por sus propios intereses sino también por los intereses de los demás.

El pasaje de hoy desafía a los valores y mensajes mundanos. El mensaje que propaganda el mundo es: “Es todo sobre ti!” Hasta incluso, muchos de los Cristianos también piensan de la misma forma. Cada cosa que hacen, ya sea servir a Dios o a los demás, calculan si vale la pena o no, o se preguntan “Qué gano yo sacrificando mi tiempo?” Es por eso que nos cansamos, perdemos fe y enfoque y nos quejamos al no ver los resultados. Sin embargo, Jesús nos llama a poner a otros primeros y velar por los intereses de los demás sin egoísmo o vanidad. El servicio a Dios y a nuestros prójimos es entrega con humildad, sin esperar nada a cambio. Jesús dijo: “Si te aferras a tu vida, la perderás; pero, si entregas tu vida por mí, la salvarás” (Mateo 10:39).