Filipenses 2:5-8
5 La actitud de ustedes debe ser como la de Cristo Jesús, 6 quien, siendo por naturaleza Dios, no consideró el ser igual a Dios como algo a qué aferrarse. 7 Por el contrario, se rebajó voluntariamente, tomando la naturaleza de siervo y haciéndose semejante a los seres humanos. 8 Y al manifestarse como hombre, se humilló a sí mismo y se hizo obediente hasta la muerte, ¡y muerte de cruz!
Philippians 2:5-8
Your attitude should be the same as that of Christ Jesus: Who, being in very nature God, did not consider equality with God something to be grasped, but made himself nothing, taking the very nature of a servant, being made in human likeness. And being found in appearance as a man, he humbled himself and became obedient to death — even death on a cross!
El aprender a ser humildes parece ser muy difícil, pero tenemos al mejor ejemplo de humildad: Jesús. Nuestra actitud debe ser como la de nuestro Señor Cristo Jesús. Siendo Dios y Rey de los cielos, Jesús rebajó por su propia voluntad a servir y morir por nosotros! El estuvo dispuesto incluso a ser tratado como criminal por nosotros. Cada vez que soy tentada a sentirme orgullosa por lo que hago, El Espíritu Santo me acuerda de la perfecta humildad de Jesús. Cuando pienso en lo que estuvo dispuesto a rebajarse por obediencia al Dios Padre, lo que hago o puedo hacer por Dios es lo mínimo de lo mínimo. De qué me puedo enorgullecer mas que por la humildad y misericordia de nuestro Señor Jesus!
“La actitud de ustedes debe ser como la de Cristo Jesús”