Juan 1:9-13
9 Esa luz verdadera [Jesús], la que alumbra a todo ser humano, venía a este mundo. 10 El que era la luz ya estaba en el mundo, y el mundo fue creado por medio de él, pero el mundo no lo reconoció. 11 Vino a lo que era suyo, pero los suyos no lo recibieron. 12 Mas a cuantos lo recibieron, a los que creen en su nombre, les dio el derecho de ser hijos de Dios. 13 Éstos no nacen de la sangre, ni por deseos naturales, ni por voluntad humana, sino que nacen de Dios.

 

John 1:9-13
9 The true light [Jesus] that gives light to everyone was coming into the world. 10 He was in the world, and though the world was made through him, the world did not recognize him. 11 He came to that which was his own, but his own did not receive him. 12 Yet to all who did receive him, to those who believed in his name, he gave the right to become children of God — 13 children born not of natural descent, nor of human decision or a husband’s will, but born of God.

 

Jesús, siendo creador del mundo, sufrió todo tipo de rechazo y desprecio por la misma gente que El creó. Sin embargo, El escogió ese camino por amor. Porque Él sabe que sin su sacrificio, el mundo no tendría esperanza y seguiríamos todavía viviendo en la oscuridad, presos del pecado. Por su gracia y misericordia, hoy podemos ser hijos de Dios. Ya que como hijos de Dios, nacemos de Él, mas no de la sangre, ni deseos naturales, ni por voluntad humana. Por qué todavía hacemos lo que nuestros deseos nos dice, lo que nuestra voluntad y cuerpo nos dice? Disciplinar y tener control propio parece muy difícil, porque es muy fácil hacer lo que nos da la gana, pero que hay de los sentimientos de Jesús? Miles de años atrás, Él vino a este mundo y fue terriblemente rechazado, hoy también es sido ignorado, pero que hay de nosotros como hijos de Dios?